Seguimos con productos de
temporada y es que todavía encontramos en las fruterías ciruela Claudia que es
esa pequeñita de color amarillo verdoso. Para hacer mermelada necesitamos que
la fruta esté bien madura. Como muchas veces pasa con los productos de huerta
que de repente hay mucha cantidad y no sabemos cómo darle salida, en el caso de
las frutas hacer mermelada es siempre una buena opción, además, os voy a
enseñar cómo embotarla para que la podamos conservar mucho tiempo en la
despensa.
Ingredientes:
- 1 kg
de Ciruelas Claudia maduras
- 400gr
de azúcar
- Zumo
de medio limón
Elaboración:
Lavamos bien las ciruelas. Les
quitamos el rabito y el hueso. Las vamos troceando y las dejamos en un bol.
Añadimos el azúcar, removemos y
tapamos el bol. Vamos a dejar reposar como una hora a temperatura ambiente.
También podéis hacerlo de víspera y dejar reposar toda la noche en la nevera.
Echamos las ciruelas con todo el
jugo que han soltado en una cazuela. Añadimos el zumo de limón y ponemos a
hervir. Cuando rompa a hervir, bajamos el fuego y dejamos cocinar a fuego suave
durante una hora más o menos dándole vueltas de vez en cuando. En cocinas del 1
al 9 lo haremos en el 3.
Transcurrido ese tiempo, veremos
cómo la cantidad se ha reducido y que ha cogido una consistencia más espesa.
Ahora sólo tenemos que triturar la
fruta. Yo suelo quitar algún cacito del líquido que sueltan las ciruelas para
tener una consistencia más espesa, pero esto es cuestión de gustos. Os
recomiendo de todas formas que antes de meter la batidora quitéis algún cacito
del jugo. De ésta manera si veis que se os queda muy espeso siempre podréis
añadir jugo, si por el contrario metemos la batidora tal cual corremos el
riesgo de que se nos pueda quedar algo más ligera…eso sí, igual de rica!!
Si os han salido muchos tarros, lo
ideal es hacerle el vacío para hacer una conserva y que aguanten muchos meses
en la despensa, vais a ver lo sencillo que es. Antes de meter la mermelada en
los tarros nos tenemos que asegurar de que estén bien esterilizados, para esto
no hay más que poner a hervir durante 10 minutos los tarros y las tapas y
secarlos bien.
Una vez tengamos bien llenos y
cerrados los botes de mermelada los metemos en una cazuela amplia. Yo suelo
poner un paño en el fondo de la cazuela para que no se estropeen los tarros al
hervir con el fondo de la cazuela. Cubrimos los tarros con agua hasta la tapa y
ponemos a hervir. Cuando rompa el hervor bajamos un poco la temperatura y
dejamos hervir durante 30 minutos. Sacamos con cuidado los tarros y los ponemos
a enfriar boca abajo.
Cuando estén fríos los tarros les
damos la vuelta y comprobamos de que no se haya escapado nada, de lo contrario
la conserva no está bien hermética y tendremos que volver a repetir el proceso.
Ya tenemos nuestra mermelada lista
para disfrutarla con un buen pan y un poco de mantequilla….mmm…un auténtico
manjar y encima casero!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar su comentario.