Muchas veces no sabemos ni qué
poner para comer o cuando nos viene gente a casa parece que se nos agotan las
ideas...con la receta que os propongo hoy os doy otra idea más ya sea para el
día a día ó para sorprender a vuestros invitados y es que éste hojaldre de
espinacas se preparara en un momento. El relleno incluso lo podéis preparar con
antelación…e incluso podéis congelar la trenza ya rellena sin hornear para luego en un momento hornearla (no hace falta descongelar). Así que no tenéis excusas para no hacerlo. Echadle un vistazo a la receta y hacedla porque
os encantará.
- 1
Rollo de hojaldre fresco
- 1 Manojo de espinacas frescas (pueden ser congeladas)
- 1
Cebolleta picada
- 1
Loncha gruesa de jamón de york ó pavo
- 1
Tarrina de queso cremoso (tipo Philadelphia ó Mascarpone)
- Nuez
Moscada
- Semillas de sésamo
- Queso
rallado
- 1
Huevo
Elaboración:
Calentamos 1 cucharada de aceite en
una sartén y rehogamos la cebolleta a fuego medio (en cocinas del 1 al 9 lo
haremos en el 4 ó 5).
Cuando la cebolleta empiece a coger
un poco de color, añadimos las espinacas troceadas con un poco de sal,
rehogamos bien y veremos cómo enseguida lo que parecía mucha cantidad se nos
queda en “nada”. En éste momento añadimos el queso cremoso, rallamos un poco de
nuez moscada y le ponemos un pelin de sal, mezclamos todo bien hasta que el
queso se haya integrado bien con las espinacas. Por último, añadimos un puñado
de queso rallado, volvemos a integrar todo y retiramos la mezcla a un cuenco y
dejamos enfriar, ese será nuestro relleno, difícil eh? jeje
Es importante que antes de rellenar
la trenza tengamos el relleno frío o por lo menos templado para que al ponerlo
en el hojaldre éste no se ablande. El hojaldre también tiene que estar bien
frío, sólo lo sacaremos de la nevera cuando lo vayamos a rellenar.
Abrimos el hojaldre y con la parte
que no corta del cuchillo lo “dividimos” en 3 partes iguales y marcamos sin
llegar a cortar, esto nos servirá de guía.
Empezamos a cortar tiras en uno de los
extremos y seguiremos con el otro. De ésta manera tendremos la parte central
libre.
Echamos el relleno en la parte
central cubriendo bien. Añadimos los taquitos de jamón por encima.
Cogemos una de las tiras de un
extremos y la llevamos hacia el centro, hacemos lo mismo con otra tira del
extremo opuesto para superponer tiras unas encima de las otras y así trenzar el
hojaldre. Repetimos la operación hasta llegar al final.
Untamos con huevo batido el hojaldre
y espolvoreamos con semillas de sésamo, también se pueden usar otro tipo de
semillas ó incluso queso rallado.
Cuando saquemos el hojaldre del
horno lo pondremos en una rejilla para que mientras se enfría un poco la parte
de abajo no se humedezca por el relleno y el calor. Normalmente los hornos
suelen traer una bandeja de rejilla, lo podéis poner ahí.
Sólo tendríamos que esperar unos
pocos minutos para que pierda la mayor parte de calor y estará listo para
comer.
Mirad el corte tan bonito que tiene…es
una manera muy atractiva para hacer comer espinacas a los peques de la casa y
no tan pequeños! Pero veréis cómo os piden hacerlo más veces.
Y como suelo decir muchas veces, a
la hora de preparar ésta receta no dudéis en doblar las cantidades, podéis usar
la mitad para hacer una trenza y la otra parte de relleno congelarla ó bien
usarla para rellenar unas empanadillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar su comentario.