Hoy que estrenamos las fiestas
navideñas os traigo una idea de un postre diferente, vistoso y lo más
importante, muy rico. Se trata de una tarta muy típica inglesa que lleva una
base de galletas de mantequilla, plátano, crema y toffee. Yo os propongo una
versión diferente que en mi caso hago con cajeta que es como un dulce de leche
mexicano a base de leche de cabra pero que perfectamente podéis sustituir por
dulce de leche ó leche condensada. Es de esas tartas que es mejor preparar con
un poco de antelación así que viene perfecto para éstas fechas, además que se
hace en un momento y no necesita horno. Animaros con éste postre y disfrutad en
la cocina J!
- 1 Paquete
de galletas tipo bretonas (podéis usar digestive, espéculos o las que más os
gusten)
- 100g
de mantequilla fundida
- 50gr
de azúcar
- 250gr
de queso mascarpone
- 300ml
de nata para montar
- 2
Plátanos maduros
- ½ Bote
de cajeta ó dulce de leche*
- Cacao
en polvo
*La cajeta es un dulce de leche mexicano que
se hace con leche de cabra, aquí es difícil encontrarlo pero podéis sustituirlo
por dulce de leche normal que hoy en día podemos encontrar en cualquier súper.
Pero si tenéis ocasión, probad la cajeta, si os gusta el dulce de leche os
encantará!
Elaboración:
Rompemos las galletas y las
trituramos hasta que quede como la arena más o menos. Podéis hacerlo usando una
picadora o también podéis meter las galletas dentro de una bolsa y romperlas
bien con un rodillo.
Una vez tengamos las galletas listas
sólo tenemos que añadir la mantequilla fundida hasta obtener como una pasta que
usaremos para hacer el fondo de la tarta.
Echamos la mezcla de galletas y
mantequilla al molde y lo aplastamos y esparcimos bien por el fondo y una parte
del borde. Metemos el molde en la nevera para que la base se enfríe mientras
preparamos el resto de ingredientes. 
Cortamos los plátanos en rodajas al
bies que sean más o menos del mismo tamaño.
Sacamos el molde de la nevera,
cubrimos el fondo con las rodajas de plátano y echamos por encima la cajeta ó
el dulce de leche. La cantidad es orientativa, dependerá de lo golosos que
seamos…jeje!
Montamos la nata y la añadimos con
movimientos envolventes a la mezcla de queso y azúcar. Mezclamos bien hasta que
todo quede bien integrado y no haya grumos.
Cubrimos con la mezcla de queso y
nata y para terminar, decoramos con un poco de cacao el polvo ó de chocolate
rallado en su defecto.
Metemos la tarta en la nevera y
dejamos enfriar como 1 hora mínimo antes de comerla, un poco de paciencia y
estará lista para chuparnos los dedos!
Mirad el corte tan bonito que tiene, dan ganas de servirse un trocito eh?
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