En un post anterior ya hicimos
una pasta carbonara pero que sepáis que la auténtica salsa carbonara italiana
no lleva nata…esto de la nata fue una aportación francesa que con el tiempo ha
cogido bastante fama con lo que muchos terminamos pensando que la carbonara es
así…pero nada de eso. La auténtica carbonara se hace sólo con yemas de huevo,
pimienta y queso rallado parmesano ó pecorino. Quiero enseñaros ésta receta
porque aunque la carbonara con nata esté buenísima, ésta versión es realmente rica y rapidísima de preparar. Id comprando pan que lo vais a necesitar…jeje!!
Ingredientes para 2 personas:
- 160gr.
De espaguetis*
-
125gr. De bacon ó panceta ahumada en trocitos
- 2
Yemas de huevo
- 80gr.
De queso parmesano o pecorino**
-
Pimienta y sal
*Yo suelo calcular más o menos 80gr. De pasta
por persona, pero depende de cómo la preparéis, si luego tenéis otro plato más
o del hambre que tengáis…echáis más o menos cantidad, yo os doy un poco la
pista
**Os aconsejo que compréis una cuña de queso en lugar de comprarlo ya rallado, el sabor
cambia bastante….y con cualquier rallador que tengáis por casa lo haréis en un
momento. Encontraréis con mayor facilidad el queso Parmesano, lo venden en
cualquier súper
Elaboración:
Ponemos abundante agua a hervir con
un poco de sal. Cuando hierva el agua, echamos la pasta y la dejamos cocer
durante unos 8 minutos ó hasta que esté al dente (un poco durita). Cada pasta
puede tardar un poco más ó menos en cocerse así que lo mejor es que comprobéis
las instrucciones del paquete. Cuando la pasta esté cocida la escurrimos y como
siempre, guardamos parte del agua de cocción para luego poder “estirar” la
salsa.
Mientras tanto ponemos a dorar el
bacon en una sartén sin nada de grasa, el propio bacon irá soltando su grasa.
Lo haremos a fuego medio, en cocinas del 1 al 9 en el 4 /5.
Por otro lado, en un bol mezclamos
las yemas de huevo con un poco de sal y bien de pimienta molida (a mí me gusta
que tenga bien de pimienta pero esto a vuestro gusto). Añadimos el queso
rallado y mezclamos con una varilla.
Retiramos el exceso de grasa en la
sartén del bacon, bajamos la temperatura a fuego suave (al 3), añadimos la
pasta escurrida, mezclamos y echamos la mezcla de yemas con queso. Es
importante que el fuego esté bajo, incluso se puede hacer éste último paso con
el fuego apagado para evitar que se nos cocinen las yemas.
Mezclamos todo con cuidado y para
conseguir una salsa más cremosa, vamos a incorporar unos 2 cazos del agua de cocción, si véis que todavía se queda
un poco seca la pasta le añadís otro cacito más.
Servid
la pasta al momento y si queréis, para darle el último toque le podéis rallar
por encima otro poqutio de queso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar su comentario.